La promesa de los hilos que unen el alma: Pelousey celebra el Festival des Fils, Dentelles et Broderies 2025
En el corazón de la región de Bourgogne-Franche-Comté, donde las colinas suaves se tiñen de verde y los tejados parecen susurrar historias de antaño, la pequeña localidad de Pelousey se prepara para un fin de semana lleno de magia, tradición y belleza textil. Los días 18 y 19 de octubre de 2025, la Salle Communale de la Noue acogerá uno de esos encuentros que no sólo celebran el arte de las manos, sino también la calidez del reencuentro: el Festival des Fils, Dentelles et Broderies.
Un evento pensado para quienes vibran al compás del encaje, del hilo que se cruza y se entrelaza con mimo, de la aguja que borda no solo telas, sino también emociones. Un homenaje a la paciencia y la belleza, a la creatividad más silenciosa pero profunda.
Dos días para celebrar el arte textil
El sábado, de 14h a 18h, y el domingo, de 10h a 17h, se abrirán las puertas de este festival que contará con expositores de materiales diversos, demostraciones en vivo, y sobre todo, ese ambiente entrañable que sólo saben crear las verdaderas artesanas y amantes del hilo.
La Asociación Loisirs Evasion de Pelousey, con sus actividades “Fils en fuseaux” y “Loisirs créatifs”, se encarga de organizar este encuentro que ya se ha convertido en una cita señalada en el calendario de muchas encajeras, bordadoras y tejedoras, no sólo de Francia, sino también del otro lado de la frontera.
Será posible adquirir materiales originales, descubrir nuevas técnicas, conversar con creadoras de toda la región y compartir la pasión que nos une: la del trabajo bien hecho, el saber heredado y la búsqueda constante de la belleza a través del textil.
Un pueblo con alma de taller
Pelousey, con apenas 1.500 habitantes, es una de esas joyas escondidas del Doubs (departamento 25) que sorprenden por su vitalidad cultural. Pasear por sus calles es encontrarse con la calma y la cercanía de la vida rural francesa, donde el tiempo parece haberse adaptado al ritmo de las estaciones y del telar.
Quienes acudan al festival pueden aprovechar la ocasión para descubrir esta región encantadora. A tan solo 10 kilómetros de Besançon, la capital del Franco Condado, se abre una ventana al patrimonio, a la historia y al paisaje. La ciudadela de Besançon, Patrimonio Mundial de la UNESCO, es una visita imprescindible. Sus murallas abrazan siglos de historia, y desde ellas se divisa el serpenteo del río Doubs como si fuera un hilo que también traza su propio encaje natural.
Más allá del hilo: turismo y sabor
Después de una intensa jornada entre bolillos y agujas, nada mejor que dejarse seducir por la gastronomía local. En los alrededores de Pelousey abundan las queserías artesanales, donde se elaboran joyas como el Comté o el Morbier, quesos con carácter que, como el encaje, requieren tiempo, cuidado y una pizca de amor.
Y para quienes quieran estirar la escapada, las rutas de senderismo por los bosques del Jura, la tranquilidad de los lagos cercanos o una visita al Museo del Tiempo en Besançon ofrecen una experiencia completa para el alma.
Una entrada simbólica para un mundo inmenso
El acceso al Festival tiene un precio simbólico de 2 euros, pero lo que se recibe a cambio es mucho más valioso: inspiración, conexión, aprendizaje y esa sensación reconfortante de saber que el arte de nuestras abuelas sigue más vivo que nunca.
El correo de contacto para más información es couvigepelousey@gmail.com, una dirección que seguro en estos días arde de entusiasmo e ilusión.
En definitiva, el Festival des Fils, Dentelles et Broderies 2025 es una celebración del arte manual, de la comunidad, del hilo invisible que nos une a través del tiempo. Un encuentro que, más allá de exponer técnicas, materiales y productos, reivindica el placer de crear con las manos y el corazón.
Quienes tengan la oportunidad de acudir a Pelousey esos días, no solo se llevarán nuevas ideas y materiales en su cesta, sino también un pedacito de esa Francia artesanal y cercana que se resiste —y con razón— a desaparecer.